¿Es la hojarasca
o son los pasos invisibles de la fiera?
Hiere la coagulación de la sangre
en el vértice del deseo.
Mis manos son zarpas
rasgando el aire de la fiera impune
que aún llevo dentro.
Oh, tú, pantera oscurísíma,
no cesas de herir mi entraña
en cada uno de tus asaltos.
(Grabado de Adamo Scultori)